A las afueras de la ajetreada y trendy colonia Roma persiste un sitio que ha sobrevivido a las modas y a los constantes cambios de fachada que conforman la vida del barrio desde principios del siglo XX: el Covadonga es un hito obligado a visitar alguna vez en la vida, aunque siempre con una ligera sensación de extrañeza.
No es para menos: no se trata de la típica cantina donde se sirven botanas a varios tiempos; la música nunca amenaza el murmullo de las conversaciones ni el choque de las fichas de dominó, y las partidas que comenzaron hace décadas siguen llevándose a cabo entre las mesas de parroquianos leales a los que uno, como recién llegado, pareciera interrumpir con su presencia.
El Covadonga mismo es una contraseña entre iniciados que se ha popularizado entre círculos de jóvenes intelectuales, artistas y fiesteros que desconocen que el verdadero nombre del lugar es ‘cantina “El Escudo”‘.
Se trata de un lugar muy recomendable para ir en grupos grandes para dejarse consentir luego del trabajo o de asistir a alguna presentación cultural. Las recomendaciones del lugar son legendarias, aunque la carta puede ser vertiginosa para el recién llegado. Si quieres jugar a la segura pide tortilla española, carne tártara o la torta Covadonga (para compartir o para estómagos voraces, dado su impresionante tamaño).
Más que un lugar que forme parte de la escena fiestera y la vida nocturna de la ciudad de México, el Covadonga es un hito turístico: un monumento a tiempos tal vez mejores, tal vez peores, pero en suma, pasados, donde la conversación entre buenos amigos y colegas era la norma.
Localización
Puebla #121, entre Orizaba y Córdoba, col. Roma
Precio promedio: entre $150 y $300 por persona
Teléfonos: 5533-2701 y 5533-2922