El edificio que hoy alberga el Museo Franz Mayer ha sido testigo de grandes historias.
El monumento histórico que hoy funge como la sede del Museo Franz Mayer es en realidad el antiguo Hospital de San Juan de Dios. Se trata de una edificación que data del siglo XVI, y que ha sido testigo de acontecimientos increíbles que han permeado la historia de la Ciudad de México.
Por sus pasillos y muros, han pasado toda clase de personajes. Desde médicos y frailes hasta prostitutas y artistas.
La historia del Claustro del Museo Franz Mayer comienza en la época del virreinato, un periodo en el que la ciudad albergaba una gran y diversa cantidad de gente. Durante este tiempo, solamente aquellos que pertenecían a los más altos niveles sociales gozaban de servicios de calidad en cuando a salud se refería. Y por este motivo, en 1582, se funda esta casa-hospital para amparar a niños abandonados y darles servicio a personas enfermas.
A este recinto se le conocía como el Hospital de los Desamparados, se levantó en el Centro Histórico de lo que solía ser la Nueva España.
Para 1604, los hermanos de la orden hospitalaria San Juan de Dios se hicieron cargo del lugar. Se modificaron las instalaciones y para el siglo XIX el edificio pasó a ser utilizado como cuartel militar, colegio de niñas, convento de monjas, Dirección de Sanidad, instituto para la atención de prostitutas y hospital de sifilíticas.
También funcionó como Diario Oficial de la Federación, depósito de la Dirección General de Correos, y recinto para organizar fiestas y otros festejos.
Si bien el inmueble tuvo principios humanistas y religiosos, también se convirtió en una edificación funcionalista y profana que buscaba cumplir con las incipientes necesidades de la población de una ciudad en desarrollo.
En el marco de los Juegos Olímpicos de 1968, finaliza una etapa del Claustro para dar comienzo a otra. A partir de ese año, el lugar comienza a albergar distintas colecciones de artesanías. Con el tiempo el espacio se vuelve una especie de mercado, hasta que los estragos de la estructura obligan su desalojamiento.
No es hasta 1981 que el Gobierno Federal concesiona el monumento al Fideicomiso Cultural Franz Mayer, para fundar un museo de artes decorativas. Dicho recinto se fundó con la colección privada del alemán, y hoy se constituye como el museo más importante cuando de exhibiciones de diseño y fotografía se trata.
En 2004, el Claustro del Museo Franz Mayer se declara como zona de paz por el XIV Dalai Lama. Tras una ardua remodelación, esta zona del museo figura como una de las más hermosas por sus jardines y fuentes. Las paredes albergan exposiciones temporales, la música de la época de su construcción se escucha de fondo mientras uno camina por los hermosos pasillos. Sin duda el Claustro es el lugar más agradable de todo el museo, ¿ya lo conoces?
Dirección: Av. Hidalgo 45, Centro Histórico de la Cdad. de México, Guerrero, Cuauhtémoc, 06300 Ciudad de México, CDMX