Pocos lo saben, pero además de ser un monumento, la Cabeza de Juárez es también un museo.
En la delegación de Iztapalapa, al oriente de la ciudad, se encuentra una colosal obra que se construyó a manera de homenaje para Benito Juárez. La Cabeza de Juárez (nombre que se le dio a este monumento) es quizá más una referencia geográfica que un punto cultural de la zona. Y es que comúnmente se utiliza para indicar la salida a Puebla desde la Ciudad de México.
Pero lo cierto es que esta obra, además de ser un monumento, es también un museo que cuenta con una sugestiva historia.
Para celebrar el primer centenario de la muerte de Benito Juárez, Luis Echeverría mandó construir una obra en 1972. La Cabeza de Juárez se levantó con el objetivo de que en el proceso intervinieran arquitectos, ingenieros, técnicos, obreros y pintores.
El proyecto acabó de realizarse en 1976. Los murales que constituyen el monumento son abstractos. En un principio se planeaba que correrían a cargo de David Alfaro Siqueiros, pero debido a su delicado estado de salud, la tarea fue tomada por su cuñado, Luis Arenal.
El edificio se ubica sobre la avenida Guelatao de Juárez y forma parte de la Alameda Cabeza de Juárez, que se conforma por una glorieta y puentes peatonales.
Sin duda lo más interesante del monumento son sus interiores, se trata de un pequeño pero maravilloso recinto que cuenta con obras de David Alfaro Siqueiros, Diego Rivera, José Clemente Orozco y Rufino Tamayo. Todas acerca de Benito Juárez.
El museo tiene también grabados y cronologías desde 1806 hasta 1872. Las piezas cuentan la trayectoria del Benemérito de las Américas. También narran la historia del monumento, con fotografías que muestran el día que trasladaron la gran cabeza y una lista de las personas que participaron en el proyecto.
En el lugar se expone una colección de banderas de América. Se trata de un espacio donde destacan las obras de militancia comunista y el ánimo nacionalista. En ocasiones el Museo Cabeza de Juárez ofrece talleres para personas de distintas edades. El lugar está abierto al público todos los días.
