Todo lo que puedes hacer en el Parque Nacional Cumbres del Ajusco.
Pese a las flagrantes manchas urbanas que se ubican en las zonas bajas del Ajusco, este parque es uno de los espacios naturales más hermosos y emblemáticos de la capital. Desde 1936, las áreas de bosques y pastizales que constituyen el sitio fueron nombrados (por decreto) como un parque. Y desde aquel año, el Ajusco se ha convertido en un destino concurrido por las familias citadinas.
Es importante mencionar, que se trata de un espacio natural protegido, que supera los 3,900 metros de altura. Diferentes especies de flora y fauna viven armoniosamente en el lugar, que es comúnmente visitado por sus hermosos paisajes y la profusa cantidad de actividades a los que éstos dan cabida.
Por lo general, es durante el invierno cuando el Ajusco recibe a miles de capitalinos en sus parajes. Las cimas de las montañas se pintan de blanco, y esto resulta sumamente atractivo para los que adoran pasar el fin de semana en un ambiente ecológico y campirano. Sin duda las actividades extremas son las más populares del parque. Aquí algunas de las que puedes practicar:
Excursionismo
Esta práctica consiste en un recorrido, una travesía que se hace por diversión o para descubrir nuevos lugares. El Ajusco es el lugar ideal en la ciudad para practicar el senderismo. El viaje consiste en más de 15 kilómetros, pero está la opción de acortar el tramo. Lo mejor es ir encontrando especies de plantas y hasta animales, mediante se recorre el bosque de la montaña. Las vistas que se asoman durante el excursionismo en el Ajusco son impresionantes.
Alpinismo
Si eres de los que gusta de escalar montañas, el Ajusco es la mejor opción en la ciudad para hacerlo. La ruta es circular, y se recorre en aproximadamente cinco horas. Desde luego, el líder hace paradas en el trayecto para admirar los paisajes. En esta práctica, alcanzarás más de 3,000 metros. Es un excelente deporte para acondicionar tu cuerpo, despejar tu mente y respirar aire fresco.
Bicicleta 
Existe ya una ciclovía rural que atraviesa las faldas del Ajusco. Tiene una extensión de 28 kilómetros y es estupenda para hacer ejercicio al mismo tiempo que disfrutas de la vista y el clima. También está la opción para los más extremos. Aunque no son vías como tal, sí hay caminos surcados para los ciclistas de montañas. Bajarlas a bordo de una bicicleta será una experiencia llena de adrenalina.
Paseo en moto
Existe, asimismo, la opción de rentar motos y pasear por casi todas las áreas recreativas que constituyen el Ajusco. Se trata de una práctica que se disfruta más en grupo. Así que se tienes planeado visitar el parque al lado de tus amigos o familiares, no dudes en subirte a las motos para contemplar los paisajes de manera extrema y divertida.
Gotcha
Para los que verdaderamente gustan de las actividades de adrenalina, están los campos de gotcha. Este deporte, normalmente, se lleva a cabo en un lugar amplio y al aire libre. Y qué mejor que el Ajusco para divertirse con estas bolitas de pintura. Tienen diferentes escenarios, pensados para que niños y adultos puedan gozar de esta experiencia.