Después de 26 años y gracias al productor mexicano Gastón Pavlovich, pronto se estrenará una nueva película de Scorsese.
Hace más de dos décadas, el neoyorquino Martín Scorsese, tuvo la brillante idea de dirigir el filme de Silence, basado en la novela homónima de Shusaku Endo. Se trata de una obra que narra la historia de dos sacerdotes jesuitas en el siglo XVII, que se enfrentan a una persecución violenta cuando viajan a Japón para encontrar a su mentor.
El guión fue adaptado por Jay Cocks y el mismo Scorsese. Desafortunadamente, como suele pasar en el mundo hollywoodense, el proyecto fílmico entró en estado de pausa por cuestiones monetarias y otras cintas del director. Sin embargo, para Scorsese, estrenar Silence siempre fue un sueño personal.
Por su parte, el productor mexicano Gastón Pavlovich (guionista de El Estudiante) creó su propia casa productora, la Fábrica de Cine, en la Ciudad de México. Siempre buscando el mercado internacional, Pavlovich se dedicó a estudiar el sistema cinematográfico de Hollywood. Fue así como comenzó a gestionar en películas como Max Rose con Jerry Lewis y A Hologram for the King con Tom Hanks.
Como si fuera obra del destino, ambos realizadores se juntaron. Por un lado, en medio de tantas complicaciones y luego de 26 años, se abrió una ventana para poder llevar a cabo Silence; por el otro, Gastón Pavlovich empezó a apostarle proyectos con potencial pero sin mucho apoyo.
"Al principio su abogado me dijo: si haces esta película, vas a tener una carrera brillante en Hollywood y vas a tener el apoyo de él (Scorsese), pero si no lo logras, jamás harás algo. Me dijo toma esa noche para tu decisión y si decides no hacerla, no te acerques más. Y yo dije, no me conocen en Hollywood, qué puedo perder", comenta Pavlovich en entrevista para El Universal acerca del primer acercamiento con la película.
Después de tormenta, llegó la calma. Silence fue filmada en Taiwán, con un excelente elenco conformado por Andrew Garfield, Adam Driver y Liam Neeson. Fue estrenada en el Vaticano, y estará en salas de cines estadounidenses a partir del 23 de diciembre. Desde su dirección y producción, hasta su cast y fotografía, esta cinta promete ser una de las mejores del año y favoritas al Óscar.
Imagen: EFE.