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10 cualidades que hacen a los barrios verdaderamente caminables

La calidad de vida colectiva, más que nunca en la historia, está vinculada a la amabilidad de la ciudad donde vivimos.

Una de las maneras más poéticas, accesibles y saludables de recorrer una ciudad, es hacerlo a pie. Quizá ningún medio de transporte como nuestras propias piernas para percibir un espacio con la velocidad necesaria para reconocer olores, ver las caras de los demás, incluso propiciar una conversación o incentivar la economía interna.

Lo anterior sin mencionar que la mejor manera de ocupar menor espacio es transportándonos con nuestras dos piernas, y al mismo tiempo ayudar al medio ambiente. Las ciudades peatonales son, además, muy atractivas para el turismo. Pero un barrio no puede ser caminable de no cumplir con ciertos requerimientos básicos que promuevan tanto la seguridad del caminante como un tránsito confortable, que invite a disfriutar el trayecto, así se haga con prisa.

En los últimos años se han implantado, cada vez más, andadores, destinados cabalmente para los peatones. Aunque, más allá de cerrar calles enteras, la cultura de barrios caminables puede promoverse a partir de aspectos muy sencillos que nosotros como ciudadanos debemos exigir cada vez más, y a su vez, poner de nuestra lado para que la cultura del peatón pueda asentarse en nuestros barrios.

Los siguientes son 10 aspectos, que según diversos estudios sobre urbanismo, hacen de un barrio uno caminable:

 

Uso de suelo variado

Cuando en una colonia se otorgan de manera inteligente y ordenada permisos de uso de suelo diversificados, se promueve el tránsito a pie por las calles. Por ejemplo, si en una manza existe una escuela, una iglesia, pero además cafeterías, ello conlleva a que sea muy práctico recorrer las calles para consumar distintas actividades. Si hacemos un repaso, en los barrios residenciales donde existe una sola vocación de uso de suelo, la cultura del peatón suele ser casi nula, ya que para cumplir necesidades de otra índole las peronas deben transportarse a otras zonas.

 

Áreas Verdes

Está comprobado que la naturaleza nos hace más felices. Cuando en un barrio existen suficientes árboles y áreas verdes, se detona una casi necesidad de hacer uso y disfrutar de estos espacios. Un barrio sin áreas verdes no invita a transitarlo.

 

Bancas en las calles

Ahí donde se encuentra una banca en una calle, se genera espacio público. Más allá de su presencia en los parques, las bancas en las aceras invitan a que las calles sean más concurridas, se genera una especie de conviencia y reactivación económica y recreativa de la zona.

 

Manzanas pequeñas y calles angostas

Cundo una calle es muy amplia, los automóviles suelen ir a mayor velocidad, ya que se crea una sensación de que los peatones se encuentran más lejos, y que no hay peligro para ellos. Cuando la calle, en cambio, es más angosta, los autos disminuyen la velocidad y se hace una especie de sensación más acogedora para ambos.

 

Acceso a Transporte Público

Es más fácil que te animes a salir a caminar si sabes que también puedes regresar o tomar transporte público en el momento que decidas hacerlo.

 

Calles iluminadas

Aunque pareciera que esto no influye cuando es de día, en realidad cuando las calles están poco iluminadas de noche, se crea una cultura de violencia, la cual, no necesariamente cambia por la mañana. Un barrio seguro se construye a todas horas del día.

 

Calles con señalamientos y rampas

A veces se nos olvida que en las colonias existen también personas de la tercera edad o con alguna discapacidad. Si un barrio no cuenta con los elementos necesarios para todos los habitantes, difícilmente aumenatará su cultura peatonal.

 

Mayor densidad de población

Mientras mayor número de habitantes tenga una zona, es más probable que sus calles estén llenas de peatones. Ahora, esta densidad de población debe disfruatar las anteriores cualidades, ya que la cantidad de personas por sí misma no es una garantía de habitantes que deciden moverse a pie.

 

Poco estacionamiento para los autos

Uno de los fenómenos que más decinsentivan el uso del coche es la falta de estacionamiento. Si un barrio prioriza la disponibilidad de este está propulsando directamente el uso del coche. Encarecer los lugares de estacionamiento favorece que las personas decidan caminar, usar la bici o el transporte público, tres opciones que favorecen la movilidad peatonal.

 

Más bicicletas

Una ciudad se siente mucho más amable y acogedora mientras mayor es el uso de bicicletas en ella. Los barrios más transitables del mundo para los peatones son también los más amables para las bicicletas.

Imágenes/ 1) otrootroblog.blogspot.mx; 4) elfanzinedemalbicho.blogspot.mx; 5) Antonio Ricaud;

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