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Sin agua no hay futuro: Propuestas prehispánicas para la ciudad contemporánea

Como arquitectos y urbanistas el adecuado funcionamiento de la ciudad y las relaciones que existen entre los distintos factores que la hacen un ser vivo son siempre preocupaciones qué tenemos en mente en nuestras propuestas. Sin duda la infraestructura es una de las características que más moldea a una ciudad.  Pero,  ¿qué pasa cuando la infraestructura no se emplea de la manera más adecuada? Justamente, los arquitectos Alberto Kalach y Teodoro González de León, junto con un equipo de especialistas, apuestan por una implementación de infraestructura qué garantice un mejor aprovechamiento de los recursos naturales.

Debido a los problemas de abastecimiento de agua en diferentes localidades de la Ciudad de México, nos hemos cuestionado cuales son las posibilidades arquitectónicas y urbanas que nos pudieran ayudar a resolver este problema. Si bien, una de las necesidades básicas que se deben cumplir en cualquier asentamiento humano es indudablemente el agua. No es coincidencia que  muchas de las ciudades más antiguas florecen cerca de ríos y lagos que proveen agua potable para la supervivencia del hombre. Aunque hoy día no parezca, la Ciudad de México no es un caso diferente al que se menciona anteriormente.

Los primeros pobladores del valle de México quienes fundaron la ciudad lo hicieron en diferentes puntos incluyendo un islote en el lago de Texcoco. Con grandes cantidades de agua, tuvieron que aprender a vivir en harmonía con ella y establecer un sistema de chinampas y canales para uso agrícola y hacer espacio para monumentos ceremoniales y otros espacios urbanos. Donde una vez había un sistema con cinco lagos hoy solamente se preserva uno.

Actualmente, en las épocas de sequias sufrimos de cortes de agua y resulta difícil abastecer a la ciudad. Cada vez hay que bombear agua desde mas lejos para satisfacer las necesidades mínimas de la ciudad. Al contrario en las épocas de lluvia somos testigos de inundaciones, evacuaciones y pérdidas innumerables de bienes inmuebles que en gran parte se dan por un mal manejo de materias residuales. Estos contrastes son algunos de los indicadores que nos permiten saber que la Ciudad de México tiene grandes retos que vencer para asegurar su desarrollo a futuro.

Fruto de estas preocupaciones varios arquitectos, urbanistas, biólogos, políticos y demás han tratado de sentar las bases teóricas para resolver este gran reto. Aunque se han propuesto múltiples planes y estrategias para encarrilar a la Ciudad de México pocas son las que logran abrir el dialogo para un cambio realmente sustancioso. Tal es el caso de México Ciudad Futura, un proyecto de investigación y propuesta encabezado principalmente por Arq. Teodoro Gonzáles de León y el Arq. Alberto Kalach.

La idea principal de México Ciudad Futura es resolver los problemas más latentes de esta megalópolis, uno de ellos siendo la problemática del agua. Se apuesta por regresar el territorio que una vez fue cubierto por agua a la ciudad. De esta forma se podría aprovechar el agua para consumo urbano, agricultura en la periferia del Valle de México, reforestación de grandes aéreas verdes que generarán microclimas que mejoraran hasta cierto punto la calidad de aire que día con día respiran los citadinos. Así mismo, se busca reabastecer los mantos freáticos y mejorar la condiciones del subsuelo lo cual ayudaría a detener el hundimiento de algunas zonas con alto valor arquitectónico como es el caso del Centro Histórico.  En general se apuesta aprovechar los recursos que tenemos disponibles de la mejor manera posible, de usar el agua a nuestro favor y no de luchar contra ella.

Esta propuesta encuentra sus raíces en los trabajos que fueron completados por los Ingenieros Nabor Carrillo y Gerardo Cruickshank quienes en 1965 llevan a cabo el rescate hidrológico del lago de Texcoco. A casi 50 años después de dicho rescate, resulta cada vez más obvio que la Ciudad de México requiere de una gran concientización por parte de tanto el sector privado como el público para seguir con un desarrollo integral y benéfico para todos. Sin duda, no es sin una propuesta multidisciplinaria que se comprometa a tomar en cuenta aspectos medioambientales, sociales, económicos y políticos que se podrá avanzar hacia un futuro más sostenible.

Ciudad Futura es solo un primer paso para mejorar la calidad de vida de los habitantes de la Ciudad de México, sin embargo, se necesita del esfuerzo y compromiso de todos para que esta y otras visiones aun más ambiciosas se vuelvan realidad. 

Puedes consultar el documento completo en: kalach.com/mexicociudadfutura

Imágenes de: kalach.com/mexicociudadfutura

 

Por: Jesús M. Llamosas

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