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10 mujeres que cambiaron el curso de la historia en México

Revolucionaron su tiempo y se volvieron legendarias.

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El 8 de marzo el mundo celebra el Día Internacional de la Mujer, y a pesar de que a lo largo del siglo XX las mexicanas ganaron cientos de batallas en contra de los prejuicios y la discriminación, aún vivimos en un país profundamente desigual, en el que no todas tienen los mismos derechos.

Según datos del INEGI, en México hay 61.4 millones de mujeres, más de la mitad de la población. Desafortunadamente, este gran número de ciudadanas aún tiene problemas para conseguir un buen salario, para obtener puestos de trabajo competitivos y para que se les respeten sus libertades individuales más esenciales.

Las estadísticas indican que todavía hay un largo camino por recorrer, muchos estereotipos que combatir y espacios que conquistar en una sociedad en la que, según prejuicios de gran parte de la población, las "mujeres buenas" son maternales, abnegadas, discretas y bondadosas y las "mujeres malas" son chismosas, infieles, celosas e histéricas.

Aunque falta mucho, no está de más reconocer que el gran progreso moderno de la condición femenina ha sido producto del esfuerzo y la rebeldía de muchas. Para celebrar y recordar a estas luchadoras  hemos juntado en una lista a las valientes, a las transgresoras y las que hicieron su lucha por la igualdad a pesar de tener todo en contra. Estas son algunas,  heroínas mexicanas cuyo legado va más allá del Día de la Mujer.

La Malinche, la indígena políglota

Una indígena que con su inteligencia y carisma se hizo escuchar en una época en la que nadie le presentaba atención a las mujeres. Malitzin nació cerca de Tabasco en una comunidad náhuatl, tras la muerte de su padre fue vendida a unos traficantes del sureste que le enseñaron a hablar maya. Pronto el destino la llevó junto a Hernán Cortés con quien sostuvo una larga relación. Durante mucho tiempo la Malinche fue la intérprete y la guía de los españoles, gracias a su ayuda muchos lograron darse a entender.

Leona Vicario, la luchadora

Durante la Guerra de Independencia Leona se convirtió en la informante de los insurgentes que buscaban la soberanía de México como país. A esta noble causa donó todas sus pertenencias y dedicó su vida en cuerpo y alma. Cuenta la leyenda que en una ocasión, tras ser descubierta por el gobierno virreinal, fue apresada en un convento del que escapó disfrazándose de negra. Murió a los 53 y sus restos descansan en la Rotonda de los Mexicanos Ilustres.

Sor Juana Inés, la escritora

Su amor por las letras fue el acto más revolucionario de su vida. A los 8 años escribió sus primeros poemas y le pidió a sus padres que la dejaran vestirse de hombre para poder asistir a la escuela. Nunca abandonó su amor por la escritura, tanto que se recluyó voluntariamente en un convento para poder terminar sus libros en tranquilidad, lejos del bullicio de los hombres amenazados por las mujeres inquietas. Durante su vida escribió una serie de obras de teatro, poemas, sonetos y hasta un tratado de Música.  Según Octavio Paz, Sor Juana fue la primera feminista de América.

Matilde Montoya, la doctora

Una niña nacida a mediados del siglo XIX, que desde los primeros años de su vida demostró gran amor por el estudio, tanto que terminó la escuela antes que nadie. A los 16 años esta erudito recibió el título de partera, pero esto no le fue suficiente porque su meta era ser doctora. Después de varios intentos de entrar a la Escuela Nacional de Medicina, y muchos detractores que le sugerían irse a su casa a limpiar, 1882 logró inscribirse, gracias al apoyo de Porfirio Díaz. Algunos años después se convirtió en la primera mujer en alcanzar el grado académico de médico en México.

Dolores del Río, la actriz

María Dolores nació en Durango en 1903. Su familia sufrió en primera fila los estragos de la lucha revolucionaria, por eso de muy chica se vino a la Ciudad de México donde desde pequeña mostró interés por los escenarios. A pesar de que siempre quiso ser bailarina, un encuentro fortuito con un productor de Hollywood la llevó por los caminos de la actuación donde conquistó no sólo el cine sonoro, también al revolucionario Orson Wells y al carismático Indio Fernández que la convirtió en leyenda gracias a su papel de María Candelaria.

Consuelo Velázquez, la compositora

Esta artista mostró interés por la música desde los cuatro años, por lo que casi antes de que empezara a escribir aprendió a tocar el piano. Su primer concierto lo grabó en el Palacio de Bellas Artes. Poco tiempo después se inició como compositora y en este rubro uno de sus grandes logros fue la creación de Bésame Mucho, una de las canciones más populares en el mundo, que se ha traducido a todos los idiomas posibles. Además de esta enorme hazaña Consuelito contribuyó a la carrera de Pedro Infante y escribió los temas más emblemáticos del cine de oro mexicano.

Frida Kahlo, la pintora

Una mujer mexicana que transformó su vida pintándose a si misma. Discapacitada desde los 19 años a causa de un accidente que le dejó grandes secuelas, pasó el resto de su existencia superando elegantemente su dolor a través del arte y de la creación de imágenes luminosas y sorprendes que ilustran una época en México. A pesar de todos sus amantes, hombres y mujeres, el gran amor de su vida fue Diego Rivera cuya relación inmortalizó en muchos de sus cuadros.

Elvia Carrillo Puerto, la sufragista

Nació en Motul Yucatán, y dedicó su vida a luchar por la Revolución Mexicana y por la consagración del movimiento feminista. Además de pelear en varias batallas, fue la fundadora de muchas organizaciones dedicadas a pelear por la igualdad de la mujer. En 1923 Elvia se convirtió en la primera diputada mexicana y desde su curul hizo evidente la necesidad de que las mexicanas se educaran, votaran y tuvieran derecho a la salud.  Gran parte de los derechos femeninos que hay en la actualidad se los debemos a ella.

Eulalia Guzmán, la arqueóloga

Dicen que estudiaba durante horas hasta caer desmayada. Esta mujer de lentes inmensos que encubrían una mirada altiva, se convirtió una figura central en antropología mexicana, entre otras, cosas porque fue una de las especialistas que descubrieron los restos de Cuauhtémoc, el último tlatoani azteca. Fue además una pedagoga destacada que impulsó una enorme campaña de alfabetización en nuestro país. Sin duda, su intelecto iluminó como nadie el patrimonio nacional.

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