La nueva normalidad ha cambiado radicalmente la manera en la que se manejan los negocios: uno de los cambios más significativos lo sufrieron los bares en la CDMX.
Con la transición al semáforo naranja en la Ciudad de México, muchos comercios han vuelto a abrir sus puertas. Todo comenzó con los restaurantes, los cuales fueron seguidos por los cines, los museos y, ahora, los bares. Sin embargo, la pandemia ha cambiado radicalmente la manera en que estos establecimientos se manejan. En cuanto a los bares de la CDMX, además de los antros y cantinas, se estableció una situación muy particular, la cual les permite abrir, pero con la condición de transformar su negocio temporalmente, para cumplir con los lineamientos de sanidad.
Fotografía de: Arturo Alvarado
Este cambio consiste en cambiar de giro a restaurantes, para poder atravesar la complicada situación y seguir recibiendo ingresos. ¿Qué conlleva este giro? Quiere decir que, por el momento, los bares de la CDMX no podrán fungir como tales; no podrán ofrecer los servicios de un bar, un centro nocturno o un centro de reuniones. Esta decisión se tomó considerando que es precisamente en este tipo de establecimientos en donde se pueden dar aglomeraciones considerables de personas.
Como son ámbitos de fuerte interacción social, sería casi imposible reducir el aforo y mantener el distanciamiento. Además, el alcohol siempre relaja las precauciones, por lo que, después de unas copas, toda cautela se tiraría por la borda. Para evitar todo esto, los bares de la CDMX podrán funcionar, por el momento, como fondas o restaurantes. El registro del cambio será gratuito y se hará a través de internet, con la condición de que los locales cumplan con todos los lineamientos sanitarios para los lugares que venden comida.
Imagen de: Milenio
Estas medidas son las siguientes: operar con el 30% de su capacidad, instalar filtros sanitarios, establecer ventilación natural, mantener un nivel de música que no pase los 62 decibeles y proveer a todo su personal con cubrebocas y careta. No se podrá fumar, no habrá menú físico y las mesas estarán separadas por un metro y medio de distancia. El horario será como el de los restaurantes: de 7 de la mañana a 10 de la noche. Será extraño asistir a tu bar favorito y ordenar como en un restaurante, pero hay que recordar que esta medida es temporal, para evitar el quiebre de los negocios y frenar el desempleo. Una vez que la CDMX esté en semáforo verde, los bares regresarán a sus funciones normales.
Algunos ejemplos que han sabido readaptarse y abrieron recientemente son: Baltra, Hanky Panky, Limantour, Las Brujas, Wakiki tiki y más.
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*Imagen destacada de: Gentleman Mexico