Estos ojos de agua son ideales para disfrutarse y documentarse para la eternidad.
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Las aguas freáticas son las que dan origen a los manantiales, así como también a los pozos profundos para extraer agua para fines industriales o de consumo de zonas metropolitanas.
Este tipo de yacimientos son los grandes depósitos acumulados con más profundidad, existen en el subsuelo formando vertientes y aflorando en manantiales.
Se hallan siempre en continuo movimiento y tienen un movimiento inclinado las depresiones: barrancos, ríos y mares donde llegan a salir formando manantiales.
El nivel, caudal y calidad del agua varía con el tiempo, se manifiestan en los manantiales o zonas de descarga, de manera permanente, como es el caso de los Ojos de Agua que hay eh Yucatán. Y aquí te dejamos los más lindos.
Ojo de agua Dzul Ha
En Sisal podrás ver muchos peces, aves y flora del lugar, además de remar o cerca de 100 metros del canal, hasta llegar al ojo de agua Dzul Ha, con agua cristalina donde podrás disfrutar de un baño. Este ojo de agua se caracteriza, por estar escondido entre los mangles.
Ojo de agua Río Celestún
Celestún es una población que se encuentra a 95 km de la ciudad de Mérida, y donde puedes visitar la Reserva de la Biósfera Ría Celestún, reconocido por ser el lugar de refugio invernal de miles de flamencos y de muchas otras especies de aves. El ecosistema de Celestún es único debido a la combinación del agua dulce proveniente de la Ría Celestún y el agua salada del golfo de México.
Ojo de agua de Dzilam Bravo
Dzilam tienen varios ojos de agua, cenote, laguna, y “Las Bocas” donde el rio y el mar se unen. Además, es un puerto histórico, en donde desembarcaron los españoles y se encuentra la tumba del célebre pirata del siglo XIX, Jean Laffite.
A escasos metros de su costa hay varios ojos de agua, uno de los tanto fue tan especial que en el 2003 National Geographic fue de expedición.
Ojo de agua de Chiquilá
Muy cerca del ojo de agua hay restaurantes de pescados y mariscos y complementa tu visita a Río Lagartos con una parada en Chiquilá, en los alrededores parece que no existe nada más que una enorme cantidad de árboles y un cielo limpio que se une con el cuerpo de agua.
Ojo de agua en San Crisanto (manglares)
En este sitio de ensueño brota agua cristalina que al acercarse se vuelve cobriza gracias a los minerales que enriquecen el suelo del manglar. Podrás caminar ente puentes de madera que pasan por encima del área del mangle, por lo que también podrás observar la fauna marina que aquí habita. Un lugar precioso.
Foto destacada Viaja bonito