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Leyendas históricas, coloniales, de momias y artistas es lo que se escucha en Guanajuato.
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Guanajuato es una ciudad colonial llena de edificios coloridos, excelentes vistas y calles empedradas. Pero para muchos es una de las ciudades más lindas y pintorescas de todo el país. Guanajuato parece una ciudad de Europa en medio del montañoso desierto mexicano.
La vista a toda la ciudad es impresionantemente hermosa. Una caminata hasta el Pípila, un monumento al héroe histórico de Guanajuato, lo confirma. En general, caminar por la ciudad es hermoso. Pero más allá de esto, Guanajuato tiene muchas leyendas populares y extendidas que se han ido transmitiendo de generación en generación y aquí te dejamos algunas de las mejores leyendas.
El actor que enterraron vivo
La leyenda de Joaquín Pardavé en Guanajuato nace tras su muerte, ya que son muchas las voces que aseguran que el famoso intérprete de Guanajuato fue enterrado vivo. Estos rumores nacen porque el actor sufría de catalepsia, una enfermedad que te inmoviliza por completo y elimina la total sensibilidad del individuo, incluida pérdida de pulso y respiración. Joaquín Pardavé murió con 54 años, actuó y dirigió muchas películas, además de ser un estupendo compositor y guionista. Aunque estos hechos fueron totalmente negados por los familiares del actor, hubo incluso medios que ayudaron a difundir esta leyenda.
Las Momias de Guanajuato
En 1833 hubo una epidemia de cólera que acabó con la vida de muchas personas. La leyenda dice que por miedo a que la enfermedad se esparciera más, algunas personas enfermas fueron enterradas vivas. Estas personas fueron momificadas y se dice que por eso las momias tienen cara de dolor y sufrimiento. Estas momias están exhibidas en un mausoleo localizado justo debajo de donde fueron encontradas.
El Callejón del Beso
Sin duda la leyenda más conocida del Estado. Se dice que ocurrió en un callejón estrecho donde se localizan numerosos balcones enfrentados a una distancia que permite que las personas se puedan besar. La hija de un rico terrateniente se besaba durante las tardes con un pobre minero. Cuando el padre de la mujer los descubrió besándose, tomó una daga y la clavó en el corazón de su hija. Las parejas que se besan paradas en el tercer escalón de las escaleras bajo los balcones disfrutaran de 15 años de felicidad, mientras que aquellos que lo olvidan o no lo hacen pasarán por 7 años de sufrimiento.
La bufa
Existe un hechizo en Guanajuato que promete amor y fortuna a quien lo rompa. Este hechizo solo lo puede romper un forastero, quien fascinado por la belleza de una mujer que pide su ayuda, debe superar varias pruebas. Este hombre deberá cargar a la mujer y mirar siempre al frente, sin voltearse a pesar de las numerosas voces que lo llaman. Si en algún momento se voltea, la mujer se convertirá en una serpiente y perderá su oportunidad de alcanzar una gran riqueza. Hasta ahora nadie ha sido capaz de romper el hechizo.
La Casa de las Brujas
Esta mansión está localizada en el Paseo de la Presa, en un edificio antiguo donde solía encontrarse la Escuela Falcón. Aunque nadie sabe su historia, supuestamente está embrujada; a veces es posible ver a los muebles moviéndose por sí solos.
Leyenda del Cantador
José Carpio era el hijo de un minero que cuando tenía 22 años atraía a muchas mujeres jóvenes gracias a su hermosa voz y su guitarra. Cada día su fama crecía tanto que empezó a ser conocido como El Cantador. El día que murió su padre, José abandonó la música y juró no volver a tocar una guitarra. Empezó a trabajar en la mina y tiempo después encontró la riqueza. Gracias a eso, pudo empezar su negocio en la explotación minera.
A medida que José fue alcanzando la prosperidad, los sonidos de su guitarra empezaron a ser escuchados alrededor de su barrio. Eventualmente, el área alrededor de este lugar, llamado el Jardín de las Flores, empezó a ser conocido como El Cantador.
Casa de los Lamentos
Se dice que en esta casa ocurrieron varios crímenes desde 1890 a 1910, a manos el asesino en serie Tadeo Mejía quien vivía allí y asesinó a cientos de personas en ese lugar. La leyenda cuenta que hasta el día de hoy se pueden escuchar gritos y personas llorando en la mansión.
El Pipila
Juan José de los Reyes Martinez, apodado Pipila, era un minero humilde y valiente que hizo que Don Miguel Hidalgo pudiera tomar Guanajuato. Sin su ayuda, México hubiese ganado su independencia mucho tiempo después y en distintas condiciones. Ya que durante la insurgencia los españoles se refugiaron en la Alhóndiga de Granaditas. Ahí, El Pipila colocó una losa en su espalda y cargando una antorcha se deslizó hacia la Alhóndiga, donde incendió el área, haciendo que por el fuego hiciera imposible utilizar las armas por parte de los Españoles hasta eventualmente fue posible derrotar a los españoles.
Los carcamanes
Los carcamanes eran dos hermanos de origen europeo apellidados Karkamann que llegaron a Guanajuato a principios del siglo XIX. Aunque estaban muy adaptados a su nueva vida en México, una mañana aparecieron muertos juntos al cuerpo de otra chica de su edad. La leyenda cuenta que los dos hermanos estaban enamorados de aquella mujer, por lo que lucharon a muerte por conseguir el amor de ella. Sin embargo, una serie de forcejeos acabó con la vida de los tres. Se dice que, desde entonces, por las plazuelas y calles cercanas a la casa donde vivían los hermanos deambulan tres fantasmas lamentándose por su final fatídico.