MXCity | Guía de la Ciudad de México

La leyenda del Callejón del Beso y el por qué ha cerrado al público

Si las viejas calles de México hablaran.

. . .

Guanajuato siempre ha sido un destino único en nuestro país.  Quizá porque su arquitectura  está llena de edificaciones preciosas que han convertido a esta ciudad de uno de los sitios más interesantes de México y del mundo. Una pequeña metrópoli (a sólo unas horas de la CDMX) con grandes atracciones históricas y culturales.

Dicho lo anterior, es recomendable escaparse un fin de semana a esta urbe. Perderse entre sus 380 calles estrechas y descubrir los relatos que esconde cada camino empedrado que hay aquí. Vale la pena dialogar con las ventanas, los portones de madera y los balcones de las viejas casonas que enmarcan el pueblo. Escuchar quizá los silencios que las esquinas  resguardan con tanto misterio.

Pero sobre todo es indispensable conocer el famoso Callejón del Beso. Un espacio cálido, lleno de escaletas y casas pintadas pegadas las unas con las otras, en el que supuestamente se suscitó uno de los relatos amorosos más importantes de nuestro país. Una leyenda milenaria protagonizada Carlos y Ana.

Ella era una española burguesa que vivía con su padre. Él, un adolecente que como todos los guanajuatenses de la clase trabajadora del siglo XVIII pasaba sus días extrayendo plata de la famosa Mina de la Valenciana; el emporio de minero más grande y valioso del mundo. Un lugar generaba la identidad de la región y que fue el sitio donde se conocieron Ana y Carlos.

Ahí, en la punta de una colina, en el atrio de una iglesia colonial estos jóvenes se hicieron inseparables. Y aunque en un inicio la pareja se frecuentaba en secreto, el padre de Ana no tardó en enterarse de la relación. Al no poder separarlos, el viejo aristócrata encerró a su hija en la casa y le comunicó que la mandaría de regreso a España para que se casara con alguien de su clase social.

Sin resignarse al destino que su familia había planeado para ella, Ana le escribió una carta a su enamorado para comunicarle la decisión de su papá. Abatido por la situación, Carlos decidió juntar sus ahorros y rentar por un mes una casita que estaba frente a la mansión de la familia ibérica. Por las madrugadas, los amantes se encontraban de balcón a balcón y se entregaban su cariño.

Según la tradición oral pasada de boca en boca, una noche el furibundo padre de Ana los encontró. Tal fue su coraje al verlos que sacó una daga y sin pensar la clavó en la espalada de su hija. Antes de dar su último respiro, ella estiró la mano, cada vez más fría, hacía Carlos y él la despidió un último beso.

Hay quienes sostienen que el joven no pudo con el dolor, y tras la muerte de su amada corrió a suicidarse a un pozo de más de 320 metros de profundidad que estaba cerca de la mina en la que trabajaba.

Esta maravillosa leyenda de amor lleva más de 150 años viva. Ha sido relatada por miles y miles de personas que sin querer le han regalado un poco de su vida a la anécdota. Actualmente se tiene la creencia de que todas las parejas que visitan este famoso callejón se tienen que dar un beso en los escalones, si no tendrán siente años de mala suerte. ¿será cierto?

¿Por qué fue cerrado?

Después de 27 años, fue cerrado uno de los emblemáticos balcones en el Callejón del Beso en Guanajuato en donde decenas de turistas acudían para tomarse la icónica fotografía junto con su ser amado.

Luego de varias años dando servicio a los turistas nacionales e internacionales, el llamado, ?Balcón de Ana?, donde los asistentes subían para tomarse la clásica foto del beso frente al ?Balcón de Don Carlos? ha cerrado sus ventanas al público.

El repentino cierre de este lugar cultural se dio desde la noche del sábado luego de una denuncia hecha por la propietaria de la casa, Norma Luz Gámez, quién acudió a las autoridades a proceder legalmente por el acoso de fotógrafos de esta zona, que se consideran exclusivos para explotar imágenes y no la dejan trabajar a pesar de ser un negocio establecido, según información dada por la misma propietaria.

La propietaria el emblemático sitio compartió con medios de comunicación locales los motivos para el cierre del balcón:

“Oídos sordos ante peticiones y demandas, en especial aquellos sobre acoso y violencia contra el personal del balcón haciendo énfasis a las mujeres trabajadoras. Hartazgo ante la impunidad e injusticia, ya que a pesar de las denuncias penales existentes ante el ministerio público y las autoridades reguladoras nada ha cambiado. Los estragos causados en la salud tanto física como mental, debido a los ataques verbales y físicos, el estrés causado y las constantes incidencias que han afectado de manera continua el bienestar del personal?, informó a medios.”

El Callejón del Beso

Dónde: Atrás de la Plaza Los Ángeles, en el Centro Histórico de la Ciudad de Guanajuato. Zona Centro, 36000, Guanajuato, Gto.

Exit mobile version