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Un recorrido por los edificios más emblemáticos de Art Nouveau en México

Foto destacada: Gran Hotel de la Ciudad de México

Ejemplos fulminantes de Art Nouveau arquitectónico en México.

 

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Se ha dicho que la Exposition universelle de París en 1900 marcó el hito del Art Nouveau, atrayendo a casi cincuenta millones de visitantes de todo el mundo con el fin de mostrar la arquitectura, el diseño, la cristalería, el mobiliario y los objetos decorativos del estilo.

El Art Nouveau fue una reacción contra el academicismo y el eclecticismo del siglo XIX, al grado de que no se enseñó en las academias. El principal objetivo de este tipo de arquitectura fue la utilidad de las edificaciones a través de la estimulación estética dirigida a lo sensorial. Y no es coincidencia que este estilo llegó con Porfirio Díaz, quien es el responsable de que ahora tengamos edificios tan emblemáticos de este estilo en la CDMX, y parece que los edificios más representativos están aquí.

El Art Nouveau llegó a México a finales del porfiriato y se realizaron distintas construcciones que según el pensamiento de la élite de la época, significaba la introducción a una era moderna y vanguardista, todo traído de la ciudad donde surgió este movimiento artístico, París, que para la sociedad de clase alta remitía a un símbolo de estatus y distinción a seguir.

El art nouveau es una corriente artística desarrollada entre 1890 y 1914 en Europa, como la mayoría de los casos, y se caracterizaba por el eclecticismo, el uso de líneas ondulantes, la asimetría y la inspiración en la naturaleza como punto de ornamentación. Buscaba la liberación del historicismo artístico que permeó por esos años, como el neoclásico y neogótico.

Normalmente lo puedes encontrar bajo el nombre de modernismo en lugares de habla hispana y ese adjetivo define bien al movimiento. La explosió de la revolución industrial trajo consigo innovaciones que cambiaron el pensamiento de la burguesía europea, quienes buscaban novedad y dinamismo. Esto pronto llegaría a América.

Uno de los precursores del movimiento fue Jacek Malczewski, que en sus obras optaba por combinar el art nouveau con el nacionalismo típico del Siglo XIX. Pero de los mayores exponentes encontramos a Gustav Klimt y Otto Eckmann.

Los modos de producción, el uso de materiales ostentosos y de precio elevado y la aparición del art déco fueron las causas que esta corriente artística que maximizaron referentes como Víctor Horta, Antoni Gaudí, Charles Rennie Mackintosh, o Renée Lali durara poco tiempo. Aparte, la Primera Guerra Mundial entró a escena y todo se detuvo.

 

 

Quinta Gameros, Chihuahua

 

La Quinta Gameros fue construida por un miembro de la élite político-empresarial del porfiriato en Chihuahua, el Ing. Manuel Gameros Ronquillo, quien para ello adquirió el terreno en que la construyó a Gustavo Zork el 18 de febrero de 1907; en octubre del mismo año inició la construcción bajo el diseño del arquitecto colombiano Julio Corredor Latorre.

Esta fascinante mansión es considerada uno de los edificios más importantes monumentos arquitectónicos de la ciudad. Es propiedad de la Universidad Autónoma de Chihuahua, alberga el Centro Cultural Universitario Quinta Gameros. El académico e historiador Francisco de la Maza califica esta obra como “la mejor casa estilo art nouveau que se construyera en la República y posiblemente en América”.

Dónde: Simon, Av. Paseo Bolívar 401, Zona Centro Chihuahua.

 

Palacio de Hierro de Orizaba

 

Este edificio es el máximo exponente del Art Nouveau en México y se encuentra catalogado como el único palacio metálico Art Nouveau en el mundo. Orizaba fue la quinta ciudad más importante de México y la más rica e industrial del Estado de Veracruz durante el porfiriato  en donde vivieron franceses, suecos, irlandeses, ingleses, españoles, italianos, estadounidenses, alemanes, y muchos extranjeros más.

Esta construcción debía representar la modernidad y pujanza económica de Orizaba, un palacio que presentara su internacionalización al mundo. Joseph Danly concibió un Palacio de estructura metálica desarmable. Su costo fue de 71,000 pesos de plata que en gran parte se pagó gracias al donativo que el filántropo Orizabeño, Don Manuel Carrillo Tablas hizo para costear la obra. El resto fue pagado por el Municipio y el Gobierno del Estado.

Dónde: Fco. I. Madero Nte., Centro, Orizaba, Ver.

 

Palacio de Hierro

 

Desde 1891 hasta 1921, fue posible ver uno de los lugares más emblemáticos de la CDMX: la Alameda. Esta se encuentra rodeada por edificios que nos muestran las diferentes épocas y estilos arquitectónicos que han existido en México. Pero el Palacio de Bellas Artes, fue una construcción que a pesar de tener varios elementes, sobre sale el art nouveau.

Los vitrales del interior ofrecen otro gran acercamiento a este fascinante palacio, que sin duda es un distintivo de todo el país, y un lugar visitado por millones de personas cada año.

Dónde: Av. 20 de noviembre, Centro Histórico CDMX.

 

Gran Hotel de la Ciudad de México

 

Construido en 1896 con exuberantes decoraciones que representan curvas, flores y hojas vegetales que se logró al trabajar la herrería. Los elevadores de rejillas fueron de los primeros en instalarse en México. Cada pieza de esta área aporta carácter al hotel: los pisos de mármol, los sillones rojos aterciopelados y los finos muebles antiguos.

El enorme vitral de colores que adorna su bóveda, fue creado por el francés Jacques Gruber en 1908, siguiendo el estilo Tiffany. Aunque la fachada no corresponde con este estilo arquitectónico, la estructura interna y el recubrimiento con motivos naturales son algunos de los elementos mejor conservados del Art Nouveau en nuestro país.

 Dónde: 16 de Septiembre 82, Centro Histórico CDMX.

 

Museo de Geología

El vestíbulo con pisos de mosaico y una majestuosa escalinata estilo Art Nouveau son las particularidades de este precioso recinto. Los pisos son de parquet francés y los muebles fueron elaborados especialmente para el Museo, con grabado un mazo y un martillo, elementos integrales del emblema del Instituto de Geología.

Aunque toda la composición del Museo de Geología es de un estilo ecléctico, los detalles franceses alternados con motivos prehispánicos; son la creación del espíritu de la época con una fachada labrada en roca volcánica luciendo también un hermoso trabajo de cantera. En el cuerpo central destacan tres arcos decorados y en el pasillo interior, a ambos lados, se aprecia el escudo nacional de la época.

Dónde: Jaime Torres Bodet 176, Sta María la Ribera, CDMx.

 

Palacio de Bellas Artes

 

La obra más ambiciosa de Porfirio Díaz, el nuevo Teatro Nacional que a la postre sería lo que hoy conocemos como el Palacio de Bellas Artes. Construido con una base de armazón metálico recubierto de mármol de Carrara. Las columnas fitoformes, las esculturas de mujeres en posiciones serpenteantes, las serpientes que dan forma a los arcos, cabezas de águila, ornamentos florales, todo eso es art nouveau. Aunque su construcción se vio detenida por la Revolución Mexicana pudo terminarse en 1931, cuando el movimiento artístico ya había dejado de ser importante.

Dónde: Av. Juárez S/N, Centro Histórico CDMX.

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