El término ?cabaret?, que proviene dela palabra ?cabaré? en francés, se utilizaba en un principio como sinónimo de taberna. Sin embargo, la cultura popular lo adoptó para referirse a aquellos espectáculos nocturnos en donde bellas y atrevidas mujeres salían al escenario para bailar y cantar temas que por lo general iban desde sátiras políticas hasta comedias sexuales.
Y a pesar de que los primeros cabarets nacieron en países europeos, esto no quiere decir que nuestro país no haya hecho suyo el concepto.
Cabe aclarar, que gracias a esta nueva clase de teatro musical, surgieron las ficheras en México. Se trata de esas mujeres seductoras que, alrededor de la década de los 50, llegaban a sentarse a las mesas de los hombres aficionados de los shows con el afán de hacerlos comprar el licor, y así ellas llevarse una generosa comisión.
Tal vez esta profesión clandestina te suene propia de los bares para adultos, sin embargo, fueron los cabarets en México los que dieron inicio a esta actividad.
Hoy por hoy, los cabarets han incluido en sus repertorios nocturnos otros espectáculos como los mimos, el stand up comedy e incluso, la magia. No obstante, el concepto de cabaré no se ha perdido del todo. Siguen existiendo en la Ciudad de México algunos lugares que preservan la esencia de este tipo de entretenimiento europeo:
- Amapola Cabaret: Tal vez uno de los más famosos cabarets de la capital. Se trata de un gran foro, que tiene capacidad para más de 450 personas. Sus shows van desde bailes, obras de teatro y conciertos; y todos ellos cuentan con la orquesta en vivo que transforma el lugar en uno de los foros más visitados de su zona.
Insurgentes Sur 953, Colonia Nápoles.
- La Perla: Conocido por ser el cabaret más exótico, pues la mayor parte de los bailarines y meseros son expertos en shows travestis desde 1946. El cover para ingresar al lugar es de $60, y puedes disfrutar de diferentes mezclas de licores que los visitantes definen como rudas.
República de Cuba 44, Colonia Centro.
- Barba Azul: Para los conocedores del cabaret, este lugar es un gran sobreviviente. En el ambiente se siente su antigüedad, no sólo por el aspecto de su decoración, sino por las historias gloriosas que se sabe han sucedido por esos rincones. Hay un grupo en vivo que toca las canciones que pidas, y hasta te puedes subir a cantar con ellos si lo deseas.
Bolívar 291, Colonia Obrera.
Si aún no conoces estos lugares, ¿qué estas esperando para ir a visitarlos? Lo cierto es que los planes de siempre en las colonias de siempre, no se irán a ningún lado. Y los cabarets ofrecen una cosa que otros lugres no: un verdadero espectáculo.