Primero de almendra, luego de cacahuate y ahora de maíz.
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El mazapán es un dulce tradicional español ya muy conocido en nuestro país que se elabora a base de azúcar, huevo y almendra o cacahuate que se comprime para formar un delicado cilindro de sabor dulzón.
Como todo lo tradicional, se ha conservado casi tal cual llegó desde Toledo a la tierra del maíz, y han pasado todos estos años para que alguien le diera un cambio que quizá ya necesitaba.
Héctor Fuentes Ronquillo es el hombre que le dio un nuevo sabor al mazapán, incluso un nuevo nombre. El maizapán, como su nombre lo indica, está elaborado con maíz materia prima que Héctor y su familia planeaban vender por kilo, plan que fue modificado por la pandemia.
Después de muchas pruebas con ingredientes caseros, el maíz azul tlaxcalteco que ellos usan fue transformado en el ingrediente base para una gran variedad de sabores de maizapán que se elaboran en cinco líneas de sabores: cereales, frutas, plantas medicinales, pétalos de flores y verduras.
El diseño de esta delicia es un cilindro de 5 cm de diámetro que pesa 25 gramos que se desase igual que el clásico pero que alcanza una variedad tremenda de sabores: pinole, café, amaranto, avena, chocolate, galleta, pepita verde, cacahuate, piñón, ajonjolí, pepita de girasol, cacao, almendra, naranja, limón, coco, nuez, arándanos, café, rosa, jamaica, bugambilia, girasol, betabel, zanahoria, alfalfa, canela, pericón, eucalipto y pelo de elote.
Los treinta sabores que tienen hasta ahora en su catálogo son distribuidos en Huamantla, Tlaxco, Tlaxcala y también en la Ciudad de México, en las alcaldías Benito Juárez, Coyoacán e Iztapalapa. Su precio va de los cinco a siete pesos de acuerdo al lugar y sabor de cada maizapán.
El maizapán es una nueva creación que tienes que probar cualquier día de estos, seguro te encantará y te dejará un gran sabor de boca.
Si quieres hacer tus pedidos, mira bien la última foto.
Foto destacada el sol de Tlaxcala